miércoles, 17 de junio de 2009

EL PUÑETERO AMOR QUE LO PUEDE TODO



No sé que me pasa esta semana (y la anterior, y la anterior, y la anterior...bucle...) que me voy durmiendo por las esquinas, y coño, es una mierda, me paso el día atontada cuando tendría mil cosas que hacer y que siempre dejo para mañana. Solo hay tres posibles razones:
A- El calor.
B- Me despierto sonámbula cada noche para bailar el tango sin parar.
C- Me caí en el caldero de Flumil durante el último resfriado, al más puro estilo Obelix.
Dado el grado de somnolencia, creo que las tres opciones son factibles, complementarias y simultáneas. Bueno, existe otra posibilidad, y es que esté muy necesitada de vacaciones. Al final, esta va a resultar la más convincente de todas.

Hoy me han enviado uno de esos mails con moralina que normalmente me leo muy a gusto y luego olvido para siempre, pero el de hoy me ha llamado la atención de forma especial, así que os lo reproduzco un poco más abajo.

Siempre he pensado que no todos están preparados para ser madres o padres. Es decir, cualquiera sabe engendrar un hijo, es de lo más divertido (o no). Parirlo es una cuestión de "o lo haces o lo haces". Pero educarlo es otro cantar. Paseando por la calle y viendo a algunos padres con sus críos, ¿nunca habeis pensado que debería ser obligatorio pasar un examen y conseguir un carnet que te capacite como progenitor?. Es cierto que los niños son unas fieras potenciales, pero es que por cuestiones de supervivencia, normalmente tienden a parecerse a sus sufridos papás. Así que si el niño es un repelente acabado, no debemos culparlo (o al menos, intentemos no hacerlo).

Pues todo va de la misma manera. Los grandes temas universales de todos los tiempos son la vida, la muerte, el sufrimiento y el amor. En este siglo XXI de estrés en las grandes ciudades, estamos enfermos de amor. Queremos lo mismo de toda la vida, encontrar una pareja y no estar solos, pero lo queremos rápido: en plan "helado Magnum". Ir al kiosco de los amores, comprar la pareja que más nos inspire, destaparla y consumirla. Y que el chocolate se nos funda en la lengua a la velocidad del rayo. Y que esté muy rico. Y que sea bonito y lucible. Y que nos satisfaga. En ese mismo instante, por supuesto.

Nos estamos equivocando, y creo yo que para tener una pareja también se nos debería exigir un certificado de capacitación. Demasiadas expectativas volcadas hacia el exterior y pocas para con nosotros mismos. Y lo digo yo, que estoy soltera porque no hay quien me aguante... pero los periodos de soltería tienen un alto grado de oportunidad: tiempo para reflexionar.

Por eso me ha gustado el texto que os copio a continuación. Parece fácil, pero llegar a cumplir estos once puntos es realmente complicado. ¿Vale la pena? Yo creo que sí.

Pues hala, hagamos un poco de autocrítica:

¿Realmente queremos vivir el AMOR DE VERDAD ? Esta es una "hoja de ruta" para reflexionar.
1. Primero contigo mism@
Sólo cuando estés bien contigo mism@ puedes estar bien con los demás.
2.-Manejar la soledad.
Sólo cuando manejas tu soledad puedas manejar una relación.
3.-Sólo se da lo que se tiene.
Necesitas valorarte para valorar, quererte para querer, respetarte para respetar y
aceptarte para aceptar.
4.-Paz interior.
Ninguna relación te dará la paz que tú mism@ no crees en tu interior.
5.-Fantasía que genera frustración.
Pretender que otra persona nos haga feliz y llene todas nuestras expectativas es una fantasía que sólo genera frustración.
6.-Autonomía.
Ninguna relación te brindará felicidad que tu mismo no construyas.
7.-Autosuficiencia.
Sólo podrás ser feliz con otra persona cuando, bien convencid@, seas capaz de decirle: “No te necesito para ser feliz”.
8.-Independencia
Sólo podrás amar siendo independiente hasta el punto de no tener que manipular ni manejar a los que dices querer.
9.-Requerimientos.
Para amar necesitas una humilde autosuficiencia, autoestima y la práctica de una libertad responsable.
10.-Autoestima y madurez.
Ámate a ti mismo, madura y el día que puedas decirle a esa otra persona: “Sin ti me lo paso bien”, ese día estarás preparad@ para vivir en pareja.
11.-Compartir.
Dos personas que vivan en pareja podrán ser felices sólo cuando se sientan responsables de crearse su propia felicidad y compartirla, no para hacerse felices la una a la otra.

2 comentarios:

Carles Marc dijo...

De què em sóna això?..

LANENITA dijo...

Que faria jo sense els teus mails matutins???!!!! Gracies Carles!!!