martes, 6 de octubre de 2009

INTERNET (y sus dulces amarguras...)

Aaaaaarrrrrfffgggg.... Vale, ya lo sé. Soy lentita de reflejos, qué le vamos a hacer si mi coeficiente intelectual es igual que el de una espumadera de teflón: acabo de darme cuenta de que internet es un peligro para la intimidad.

(Millones de personas aplauden, hacen la ola, me aclaman hasta en la ONU, judios y palestinos se abrazan, los franceses deciden que jamás volverán a convocar una huelga, la primavera llega de forma anticipada y se desclasifican todos los informes secretos del la CIA y el Vaticano).

(El ruido es ensordecedor.... ¡¡¡SILENCIO YA, QUE NO PUEDO PENSAR, COÑO!!!!)

(Ahora si. Gracias)

Nos aburríamos en el curro y nos pusimos a jugar con el facebook, y luego con google (que es nuestro amigo). En mala hora, porque ojos que no ven, corazón que no siente... Pero resulta que Google es como la lámpara de Aladino, lo frotas amorosamente, aparece un genio cabreado por ser esclavo y te concede todos tus malévolos deseos. El problema no es tanto que yo desee buscar mi nombre, me tengo más que aburrida. El problema viene a ser que otro desee hacerlo. Dos palabritas mágicas y en cuestión de dos segundos te puedes encontrar mi vida en un libro abierto. Y no mola, no no.

Aunque sea una friki acabada que escribe (bueno, ahora a cualquier cosa le llaman escribir...) en tres blogs y cuente mis idas y venidas feliz como una perdiz, no quiere decir que no le tenga aprecio a mi intimidad. Todo lo contrario. Lo que ocurre es que también le tengo aprecio a mi libertad de expresión. Los que leeis mis blogs sois, en un 90%, personas a las que conozco, con lo cual no tengo problemas a la hora de sacar a pasear determinadas intimidades. Sobre el 10% restante, me había hecho la ilusión de que eran senderistas virtuales que recalaban de puñetera casualidad por estos lares sin tener ni puta idea de cual es el jeto que se esconde tras Lanenita.. Pero resulta que no, que si alguien quiere buscarme adrede, se lo puede montar requetebién. Ya sea mi jefe, el Ministerio de Hacienda o el acosador del 6º derecha. Basta un click.

Esto no me gusta nada:

Todo empezó con el jodido Windows Live, que es una mierda. Si quieres conectarte a messenger, tienes que tener una versión relativamente actualizada del programa, y las últimas vienen con la red social. Cuando agregas a alguien a tus contactos para poder charlar msn, te agrega a la red automáticamente y cualquiera que esté en esa red, puede verte. A tí y a tus contactos. Vale, pues intentando privatizar al máximo la mierda esta me he cargado algún que otro contacto de hotmail. A mi amiga Sandy me la cargué accidentalmente haciendo una prueba. Lo más gracioso es, que pese a haberla eliminado, ella podía seguir viendo mi bandeja de entrada. Menos mal que pude recuperarla... ¿Fallo de seguridad o yo no sé utilizar bien el programa? Pues neófita en temas de internet, no soy... Usuaria media tangada por Microsoft.

El Facebook es otro mundo. Me flipa la gente que tiene 200 contactos... ¿de verdad conoces a tanta gente? ¿Te has hecho amigo del barrendero? ¿Eres consciente de que la hija del barrendero está liada con el hermano del carnicero de tu jefe? De hecho, hay una aplicación muy popular en Facebook que es el "Experimento: 6 grados de separación", con lo cual se pretende demostrar que el mundo es un pañuelo y que todo dios se conoce. Nos ha jodido la aldea global... Evidentemente, ahora estoy poniendo todo filtro de seguridad habído y por haber. Se lo pasarán pipa los hackers conmigo "mira, qué pringada esta, poniendo opciones de seguridad"

La dulce ironía de internet:

Otra intimidad para que mi jefe se la lea. Acabo de tirarme dos horas hablando con Londres por el puto messenger live. ¿Gratis? Teóricamente sí, pero en la práctica pago con la generosa donación de mis datos personales. ¿Sinceramente? Me la suda, me he bebido una botella de vino a través de la webcam con mi amiga. Y ha sido, casi-casi, como estar juntas en un pub del puto Finchley Road. Supongo que en cierto modo se ha de renunciar a algo para tener algo mejor, y así, se renuncia a un poco de privacidad para tener más intimidad.

Eso sí, mañana en cuanto se me pase la resaca, me pongo las pilas con el puñetero google. Coño, que no soy Belén Esteban y mi vida no le interesa a nadie... ¿O sí?

Pues que me llamen y se lo cuento!

Feliz noche de martes, amigos!!!!

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Bueeeeeno, tu nombre tampoco sale tanto en Google. Mira el mío y lo flipas.

Fino.

Anónimo dijo...

Bueeeeeno, tu nombre tampoco sale tanto en Google. Mira el mío y lo flipas.

Fino.

LANENITA dijo...

Joder, no sabía que fueras "Director de Relaciones Institucionales" de una importante compañía aérea, además de omentarísta en el diario económico "Cincodías.com" y Director adjunto de un importante periodico catalán. Debes estar forrado...

Aunque compartimos intereses, yo no soy la naturalista antitaurina defensora de los animales que aparece en google.

Qué quieres que te diga, me ha dado miedo...

Anónimo dijo...

Tu aún no sabes quién lee tu blog. Algún día haré una reseña en el diario.

Fino.

LANENITA dijo...

Moh! déjate de reseñas y contrátame. Quiero ser periodissssta de investigasionesss!!!